tanta melancolía se puede encontrar en la lluvia, en el frío, en los transeúntes y en sus paraguas, en sus andares errantes, en su caminar presuroso...
de aquí soy, de este clima, mis raíces se elevan al cielo pidiendo agua, ordenando agua, organizando nubes, pintándolas de negro, de gris negruzco, de rojo...
de aquí soy, de estas veredas por las que un café y un cigarro te obligan a disfrutar y a sonreir...
de este cielo sin cielo, de este frío tan rico que la saliva no se puede contener en la boca y los ojos no pueden permanecer abiertos mientras los orificios nasales se abren tanto que podrían contener todos los olores...
de esta tierra sin dueño, como yo, dueño sin tierra...
con los árboles danzantes y sus trajes elegantes que sostienen las gotas que evitan su destino...
con los vientos susurrando que todavía pueden detener el tiempo...
de aquí soy... de esta vida sin vida... de este recinto sin salida...
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3 comentarios:
Dicen que el frío es favorable para los escritores:
Una habitación, café, cigarros, papel y pluma...
Parece que quien lo dijo no se ha equivocado, a mi por los menos me está dado resultados (y a usted parece que también =D )...
Más días de estos!
Saludos
aahhh eso me hace recordar que a mí también me gusta ese clima.
El problema es que soy bien intolerante y amargada.
Aguas cuando la humedad despierta los olores más monstruosos en los transeuntes =S
Ay,pos por acá también ha hecho mucho frío... Y yo qué puedo decir? Si se supone que soy la señorita melancolía y de verdad disfruto mucho esta estación. Y lo bueno es que, cuando hace mucho mucho frío, lo más padre de salir a caminar es que las calles están solas, como en una película de misterio. Me invento historias, y me imagino que un asesino me persigue y otras más igual de ridículas y de divertidas. Y cruzo los dedos y convoco a toda la magia del universo para que dentro de dos años se me haga irme a vivir a las tierras cálidas del sur.
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