domingo, noviembre 05, 2006

palomilla onírica...


llegó a casa hace tiempo...
y ahí quedó...
como si durmiera...
como si soñara...

llegó a casa hace tiempo a hacernos compañía,
a morir sola ante nuestras miradas atónitas,
a renacer en nuestra memoria,
a abrir los portales del destino...

se postró en la sala a tomar café,
se postró en la sala y siguió nuestra conversación,
cuestionó nuestras ideas e inició nuevas discusiones,
y hasta fumaba mientras hablaba... nos tomó confianza...

luego llegó su transformación...
pasó de extranjera a nativa...
de exploradora a explorada...
quedó pintada en la pared...

3 comentarios:

N en reconstrucción dijo...

Yo quisiera pasar de "extranjera a nativa" también. Ando otra vez con mis líos de sentirme extranjera en todos lados, así que esa frase me gustó, jaja.
Muchos saludos estimado pseudo. Muchos saludos y un abrazillo pa`que no diga =P

Anónimo dijo...

hay tantas cosas que dejan huella de una u otra manera, sin que nos demos cuenta, sin que seamos concientes de ello, sin que sea la intencion....


aNónimo

Cyn dijo...

Las mariposas, en todas sus presentaciones, desde hace tiempo se aparcen siempre en mi vida. Esta es una buena aparición...

Pd. Recordé un poema de Gutiérrez Nájera que se llama, precisamente, mariposas:

"¡Es de noche... ya no hay mariposas!
¡Ha caído la tarde en el alma!
Encended ese cirio amarillo...
¡Las que tienen las alas muy negras
Ya vendrán en tumulto las otras,
y se acercan en fúnebre ronda!
¡Compañeras, la pieza está sola!
Si por mi alma os habéis enlutado,
¡Venid pronto, venid mariposas!"


Saludos! =D